Las 6 etapas esenciales del desarrollo personal para crecer profesionalmente
Crecer profesionalmente significa, en muchos sentidos, crecer personalmente. La carrera profesional que tenemos es un reflejo de quienes somos.
Cuando estamos buscando cambiar de trabajo o crecer profesionalmente, el camino más inteligente comienza por conocernos mejor.
Cuando te conoces mejor, puedes conquistar con mayor ímpetu y certeza tus objetivos profesionales.
En nuestra experiencia como Coaches, en el mundo laboral, hemos identificado que el crecimiento profesional sucede a lo largo de 6 etapas de desarrollo personal, el cual, sin embargo, no tiene fin en sí mismo, puesto que nuestro potencial de desarrollo es infinito.
Etapa 1: Insatisfacción
La búsqueda de un nuevo trabajo comienza muchas veces cuando escuchas más tu interior que al mundo exterior. Puede ser que el trabajo que tienes a los ojos de los demás sea un buen trabajo.
Tal vez tienes un buen salario, un cierto estatus o reconocimiento, en una buena compañía. Pero, muy en el fondo, tú no te sientes completa o realizada. Ser honesta contigo misma y reconocer que no estás satisfecha en tu trabajo actual comprende la primera etapa en tu camino de crecimiento profesional.
Etapa 2: Definición
En un mundo laboral, donde se privilegia hacer lo que alguien en la compañía nos pide hacer, solemos perder la capacidad de escuchar nuestras propias aspiraciones o sueños. Tal vez reconoces que no estás en tu trabajo ideal, pero tampoco sabes con exactitud dónde te encantaría trabajar.
En el mar de opciones y opiniones externas, puede ser difícil saberlo con claridad. Definir el trabajo ideal es un proceso, que no sucede de forma instantánea. El Dr. Gay Hendricks, recomienda destinar un momento a solas, respirando profundamente, y preguntarte varias veces: ¿Qué trabajo me encantaría hacer?
Etapa 3: Dudar
Una vez que has logrado cierta conciencia del tipo de trabajo o carrera profesional que amarías tener, es posible que transites por una etapa de inestabilidad. Es común experimentar dudas o incredulidad frente a la carrera que deseas.
Es en esta etapa, donde muchas carreras profesionales, pueden quedarse estancadas. Solemos dar marcha atrás o frenar nuestro deseo de crecer. “Nadie consigue el éxito si no está convencido de que se lo merece”, tal como lo indica Sheril Sandberg, exdirectora operativa de Facebook.
Esta etapa requiere confiar profundamente en ti y en tus aspiraciones, recordando tus logros pasados, para convencerte de tu potencial y sentir que tienes derecho al trabajo que deseas. Mary Morrissey nos sugiere hacer baby steps, pequeñas acciones para hacer tu objetivo realizable.
Etapa 4: Fe
Tus aspiraciones profesionales pueden ser tan elevadas que puedes llegar a sentir miedo de solo imaginarlas. Cuando aspiramos a lograr algo muy grande, necesitamos de un poder aún más grande. Tener fe en la inteligencia infinita en ti es esencial en esta etapa.
Confiar en ese poder es un proceso que requiere rebasar la creencia de que no lograrás, de que otros te obstaculizan o que ciertas cosas no se pueden lograr, como nos alerta el autor bestseller N. Hills. Es indispensable aprender a analizar menos y escuchar las intuiciones o corazonadas que te guían al éxito.
La fe opera en todos sentidos. Ábrete a oportunidades de colaboración con otras personas. Puede haber recursos o situaciones a tu favor, para ti esperándote, al estar abierta a recibir.
Etapa 5: Confianza
Conforme transitas las etapas anteriores, desarrollas mayor claridad, confianza y certeza de propósito, para actuar en dirección de la carrera profesional que sí deseas. Logras decir no a las situaciones que no están acorde a tu carrera profesional deseada.
En cambio, actúas con convicción a favor de tus deseos. Todos sabemos el poder de los hábitos. Al hacer de esta mentalidad un hábito, comienzas a ver y abrir tu mente a posibilidades que antes considerabas imposibles. La consecución de tu objetivo la consideras inevitable.
Etapa 6: Logros
Das pasos firmes en la dirección deseada, concretando tu objetivo específico. Tu confianza te impulsa. Tu deseo es tu combustible. La fe provoca efectos tangibles en tu vida. Tus hábitos mentales y emocionales refuerzan la credibilidad de tus capacidades.
Es en eta etapa donde tu objetivo se consuma, abriendo una nueva etapa de crecimiento profesional. El proceso vale aún más que el resultado específico. Las lecciones vividas se asimilan y la gratitud contigo misma reboza en tu corazón.
En un mundo laboral, donde premiamos la gratificación o el resultado inmediato, perdemos de vista la naturaleza del proceso mismo que conlleva al éxito. Concentra tus esfuerzos en el proceso y, al mismo tiempo, da por hecho el resultado porque esa actitud dará pie a que su consecución sea inevitable.
Nosotras somos Desarrolladoras de Talento, una firma de Coaching dedicada a servirte y acompañar a mujeres profesionistas de alto potencial, con el fin de lograr la carrera profesional de sus sueños. Conoce más acerca de nuestros servicios aquí https://www.desarrolladorasdetalento.com/productos-1
Comments